En la FILBo2018 el autor colombiano Alonso Sánchez Baute regaló más de veinte mil ejemplares de su más reciente obra, Las formas del odio, rescatando la tradición de regalar un libro en el Día del Idioma. “Me llama la atención que a la gente le sorprenda que le regalen un libro, cuando en España es tradición regalar un libro este día”, manifestó  Sánchez Baute al ver las reacciones de varios asistentes que, antes de entrar, recibieron el ejemplar en sus manos sin costo alguno. Ante la duda del porqué el libro era gratuito, el autor resumió que tanto él como la editorial no se lucraban con él y, por lo tanto, decidieron regalarlo.

En la conversación que sostuvo frente al público sobre su libro Las formas del odio, junto al empresario Antonio Celia como moderador, habló acerca de cómo el odio en sus diferentes facetas ha convertido a los colombianos en una sociedad de violencia, pero sobretodo, de desconfianza.

Sobre el proceso de elaboración de su obra, Sánchez Baute relató cómo le surgió la idea: “Llegó a mis manos el libro de la escritora alemana Carolin Emcke, Contra el odio, y me generó toda una serie de reflexiones que anotaba en columnas. Al final terminé escribiendo 15 columnas sobre las distintas caras del odio, y decidí recopilarlas en un solo texto”.

Acto seguido, confesó cómo el odio ha atravesado su vida, y lo que significa esta emoción según su perspectiva: “Todos hemos sentido odio alguna vez, en mi caso, hubo un momento de mi vida en que tenía claro cómo matar a todas esas personas que me hacían bullying cuando era niño; eso con el tiempo cambió gracias a un proceso de sanación de heridas. El antónimo del odio no es el amor, es la empatía, porque en la medida que te pongas en el lugar del otro, no vas a generar odio”.

El autor y el moderador analizaron las emociones implícitas en esta obra, que recopila las columnas de Sánchez Baute en las que ahonda sobre el odio en las redes sociales, la música, la educación e incluso en la política. Sobre el papel del fanatismo y el hedonismo cognitivo, el autor señaló: “Las redes sociales promueven a quienes promueven el odio; porque el odio vende más que el sexo. Las personas sienten placer cuando encuentran a alguien que piensa como ellas; cuando esto no ocurre se fomenta el odio, por eso el odio es también un tema de identidad.”

Finalmente, sobre la educación y la política, declaró con contundencia: “Los políticos hablan sobre educación sin darle la importancia que merece, no se preocupan por promover una educación en la que no exista la competencia. Los discursos generadores de odio que da un político alimentando males como la homofobia y el racismo tienen un solo fin: ganar votos”.

**Este texto fue elaborado por el equipo de comunicaciones de la FILBo 2018, reproducimos este articulo bajo la autorización del autor. Todos los derechos de reproducción y difusión son de la FILBo.